El informe «Logística inversa para sistemas de moda circular« resalta el papel crucial que la logística inversa desempeña en la transición hacia modelos de negocio más sostenibles en la industria de la moda. A medida que el sector responde a las crecientes presiones regulatorias y las expectativas cambiantes de los consumidores, muchas marcas están adoptando enfoques circulares, como la reventa, la reparación y el reciclaje, con el fin de extender el ciclo de vida de los productos y maximizar su valor. Sin embargo, la implementación efectiva de estos modelos enfrenta una serie de desafíos estructurales, financieros y logísticos que deben abordarse para que la transición sea viable a largo plazo.
El informe destaca 3 grandes áreas de acción: Diseño de Redes, Colaboración Financiera y Aumento de las Economías de Escala
Aquí un resumen del informe:
1. Diseño de la Red
El primer paso es el diseño de la red de logística inversa que establezca la ruta que permitirá gestionar los desechos postconsumo, incluyendo devoluciones y productos no vendidos. El objetivo es crear redes interconectadas que faciliten flujos multidireccionales de información, bienes y recursos financieros es esencial para construir un sistema logístico inverso eficaz.
Pero esto no es fácil en la situación actual ya que el sistema está fragmentado y necesita una transformación significativa. Se requiere una integración completa que abarque la recolección, clasificación y transporte, lo que solo se puede lograr mediante la colaboración estrecha entre socios locales y globales.
La colaboración debe enfocarse en crear un diseño de redes que tenga como objetivo principal el de garantizar el flujo óptimo de materiales y productos desde los consumidores de regreso a la cadena de valor.
Este enfoque se sustenta en los llamados 5Rs: retornos, recaptura, remanufactura, reutilización y reciclaje.
La falta de coordinación entre los actores involucrados en la cadena de suministro genera procesos desarticulados que dificultan el éxito de las iniciativas circulares. Para superar esta fragmentación, es fundamental que se trabaje en la simplificación de la recolección. Para ello, es importante planificar y diseñar conjuntamente con los socios logísticos la red de distribución para establecer puntos de recolección estratégicos, construir instalaciones de clasificación y desarrollar redes de transporte que logren una eficiencia comparable a la de los sistemas de logística directa.
Un elemento que puede ser facilitador pero que aún está lejos de serlo (en realidad por ahora es una dificultad más) es la integración tecnológica para mejorar la eficiencia operativa. Tecnologías como el seguimiento mediante RFID y la automatización de procesos ofrecen un gran potencial para optimizar la logística inversa, proporcionando una mayor visibilidad y trazabilidad de los productos y materiales a lo largo de la cadena. Sin embargo, muchas empresas, especialmente las pequeñas y medianas, enfrentan dificultades para adoptar estas tecnologías debido a los altos costos y la necesidad de capacitación técnica. Además, la existencia de diferentes sistemas en cada organización dificulta que los sistemas se integren o funcionen fluidamente.
Otro desafío importante está relacionado con los costos e implicaciones de un diseño ineficiente de la logística inversa. Por un lado, es necesario realizar inversiones en investigación y desarrollo permitirán la creación de nuevas soluciones que mejoren continuamente los procesos. Pero, por el otro, si el diseño no se planifica adecuadamente desde el inicio, los costos pueden aumentar de manera considerable, ya sea debido a rutas de transporte prolongadas, procesos manuales redundantes o múltiples puntos de manipulación de productos.
Aquí algunos ejemplos de iniciativas de la industria en este campo
- Circular Fashion Partnership: Esta iniciativa se enfoca en crear una red interconectada para optimizar la recolección y reciclaje de textiles postindustriales y postconsumo, facilitando el flujo de materiales y la coordinación entre actores clave.
- Sorting for Circularity Europe: Un proyecto que fomenta la recolección colaborativa y la clasificación eficiente de textiles en Europa, permitiendo un diseño logístico más coordinado y eficiente.
- H&M Group (AI para redistribución de productos): H&M utiliza inteligencia artificial para mejorar la logística en la cadena de suministro, ajustando la oferta a la demanda en tiempo real y reduciendo el exceso de inventario.
2. Viabilidad Financiera
La transición hacia este tipo de modelos requiere una estructura financiera que permita desarrollar y coordinar de manera eficiente las soluciones programas de reciclaje, tecnología, plataformas de reventa o servicios de reparación, etc. Por ello, es necesario establecer modelos financieros claros, basados en modelos de propiedad bien definidos y con planificaciones de rentabilidad que atraigan inversión.
La implementación de soluciones circulares conlleva elevados costos iniciales, con lo que es necesario compartir la carga financiera. A esto se le llama colaboración financiera y se concreta en iniciativas de cofinanciación, como por ejemplo las orientadas a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
Pero no solo se trata de realizar inversiones sino que la integración de la logística inversa abre la puerta a nuevas fuentes de ingresos. El mercado de la reventa, la restauración y el alquiler de ropa ha crecido rápidamente, y se espera que el mercado global de ropa de segunda mano alcance los 350 mil millones de dólares para 2027.
Esto presenta una oportunidad para que las marcas capitalicen estos modelos de negocio, diversifiquen sus ingresos y reduzcan su dependencia de la producción de nuevas prendas. Para que esto sean financieramente sostenible, es necesario elegir los modelos de propiedad que transformen las ventas únicas en pagos recurrentes. Ejemplos de ello son los servicios de suscripción o alquiler, que pueden generar ingresos recurrentes para las empresas.
En la misma línea , las marcas deben ajustar sus estrategias contables y de gestión para adaptarse a estas nuevas realidades. Por ejemplo, un reto para conseguir que los modelos de circularidad en la moda sean rentables es el largo plazo de retorno de la inversión (ROI). La construcción de infraestructura para la recolección, clasificación y reciclaje de textiles requiere una inversión inicial considerable, con periodos de retorno prolongados. Además, muchas tecnologías de reciclaje y remanufactura aún están en fase de desarrollo y son costosas, lo que añade otra capa de complejidad a la viabilidad financiera de estos proyectos.
A esto se suma la dificultad de navegar entre inconsistencias regulatorias en diferentes jurisdicciones, que complican la gestión de desechos y el transporte de materiales reciclables. La falta de una regulación armonizada a nivel global o regional hace que las empresas deban ajustarse a un mosaico de políticas y normativas que hace muy cara la operación y frena la adopción de nuevos modelos de producción y gestión.
Por todo ello, el acceso al capital es esencial. Las colaboraciones entre múltiples marcas, así como las asociaciones público-privadas, pueden ayudar a movilizar los recursos financieros necesarios para desarrollar la infraestructura a gran escala que la moda circular requiere. A través de estas alianzas, las empresas no solo comparten los costos y riesgos, sino que también impulsan la innovación y el progreso hacia una industria más sostenible.
Aquí algunos ejemplos de iniciativas de la industria en este campo
- Renewable Energy Initiative: Una iniciativa de cofinanciación en la que varias marcas de moda invierten en infraestructuras de energía renovable en las regiones donde se fabrican sus productos, fomentando la sostenibilidad en la cadena de suministro.
- Future Supplier Initiative: Un programa que facilita a los fabricantes acceder a financiamiento competitivo para proyectos de descarbonización, impulsando la sostenibilidad mediante inversiones coordinadas.
- **Looping Textile Co. (H&M y Remondis)**: Colaboración entre H&M y Remondis para extender la vida útil de prendas mediante la recolección automatizada y el reciclaje, apoyado por modelos financieros colaborativos.
3. Conseguir Economías de Escala
Para impulsar la viabilidad económica de los modelos de logística inversa, es necesario garantizar el flujo continuo de materiales necesarios para el reciclaje y la reutilización. Por ello, es necesario un aumento de los volúmenes de recolección, tanto postconsumo como industriales, que permitan escalar eficazmente los sistemas circulares
La recolección regionalizada puede optimizar la logística y reducir costos de transporte. Al adoptar estrategias locales, las empresas pueden responder más rápidamente a las demandas específicas de cada área, ajustándose a las normativas locales y fomentando una mayor participación comunitaria. Por ejemplo, Target optimiza su sistema de transporte al recoger artículos al final de su vida útil durante los viajes de reabastecimiento a las tiendas, minimizando los «viajes vacíos» y aumentando la eficiencia logística. Esta regionalización permite, además, una distribución más eficiente de los puntos de recolección y transporte.
Conforme crecen los volúmenes de recolección, surgen mayores oportunidades para implementar innovaciones en infraestructura y tecnología. Herramientas como el seguimiento mediante RFID, blockchain y la inteligencia artificial pueden mejorar drásticamente la eficiencia operativa, al tiempo que aumentan la trazabilidad de los residuos y aseguran la responsabilidad en toda la cadena de suministro. Estas tecnologías no solo permiten un manejo más preciso y rápido de los textiles recolectados, sino que también garantizan la transparencia en cada etapa del proceso.
Un ejemplo de innovación tecnológica en la recolección y clasificación de textiles es **TrinamiX.** TrinamiX cuenta con una tecnología portátil de clasificación utiliza sensores avanzados que permiten identificar con precisión hasta 15 composiciones diferentes de materiales textiles. Esta herramienta es especialmente útil en los procesos de clasificación manual, ya que aumenta la exactitud y la velocidad con la que se pueden separar diferentes tipos de fibras y tejidos. Además, trinamiX optimiza la calidad de los flujos de materiales, asegurando que las fibras recicladas no estén contaminadas con materiales no deseados, lo cual es esencial para mantener los estándares de calidad en el reciclaje textil.
Un desafío importante es el etiquetado preciso de los productos. Las composiciones incorrectas de fibras y productos químicos pueden llevar a la contaminación en los procesos de reciclaje, comprometiendo la calidad del material reciclado y generando riesgos de incumplimiento normativo. Por lo tanto, un etiquetado claro y uniforme es fundamental para garantizar la seguridad y la viabilidad del proceso de reciclaje.
Finalmente, un elemento del que depende todo el proceso es el cambio de comportamiento del consumidor. Será necesario implementar campañas educativas y ofrecer incentivos atractivos que promuevan la participación activa de los usuarios en estos programas. Pero no solo eso, es importante implementar una infraestructura conveniente e incentivos para que el usuario participe. Esto puede hacerse con puntos de entrega accesibles, contenedores de recolección y programas de devolución en tiendas pueden mejorar significativamente las tasas de recolección. También pueden introducirse incentivos, como descuentos o recompensas por devolver prendas usadas. Lo ideal sería que estos incentivos no impulsaran de nuevo la compra.
Aquí algunas iniciativas implementadas para fomentar las economías de escala:
- Sorting for Circularity Europe: También clasificada aquí, esta iniciativa aprovecha la colaboración intersectorial para aumentar el volumen de textiles recolectados, lo que permite mejorar las infraestructuras de reciclaje y clasificación.
- Circular Fashion Partnership: Similarmente, al compartir recursos y coordinar esfuerzos de recolección, esta alianza facilita la obtención de volúmenes de residuos textiles que hacen viable la inversión en tecnologías avanzadas de reciclaje.
- H&M Group (AI para optimización): El uso de la IA por parte de H&M ayuda a optimizar la recolección de textiles y la gestión de inventarios, lo que contribuye a las economías de escala al reducir el desperdicio y aumentar la eficiencia operativa.
Después de revisar el informe, vemos que aún hay mucho por hacer en el ámbito de la logística inversa para poder hablar de sistemas de moda circulares. La verdad es que la fragmentación del sistema, la incompatibilidad de sistemas tecnológicos, la necesidad de importantes sumas financieras y la necesidad de involucrar a las personas para conseguir más volumenes son retos muy reales que no pueden minimizarse.
Para conseguir implementar este sistema, será necesaria mucha colaboración técnica y financiera entre todos los actores involucrados que, es importante notar, no han tenido muchas experiencias de colaboración hasta ahora.
Este es definitivamente un espacio de trabajo que requiere una visión a largo plazo y que es esencial si se quiere hacer realidad la recuperación y recirculación de productos textiles o de moda en el sistema.